En México, el consumo de metanfetaminas y éxtasis ha aumentado un 400% entre 2013 y 2023, afectando principalmente a hombres (84.8%) de un promedio de 30 años, según un informe de la Secretaría de Salud. Estas drogas, clasificadas como Estimulantes de Tipo Anfetamínico (ETA), representan el 49.1% de los casos que requieren tratamiento.
En 2023, más de 179,000 personas solicitaron atención por su consumo. El aumento se debe a que estas sustancias deterioran la salud rápidamente, con un promedio de 10 años desde el inicio del consumo hasta la solicitud de tratamiento.
Sinaloa, Baja California, Durango y Chihuahua son algunas de las regiones con mayor demanda de atención. Además, el gobierno informó que las metanfetaminas fueron la droga más decomisada en México entre 2019 y 2023.
México también se ha convertido en un importante fabricante de drogas sintéticas, como el fentanilo, destinadas a Estados Unidos. La ONU alerta que el consumo global de drogas aumentó un 20% en la última década. Sin embargo, el informe de Naciones Unidas sobre las drogas, actualizado y presentado este mismo miércoles, apunta que México —junto con Afganistán, Myanmar y Siria— lidera la fabricación mundial a gran escala de drogas sintéticas y que los carteles mexicanos de la droga se han convertido en los principales proveedores de fentanilo ilícito y otros opioides sintéticos en Estados Unidos desde 2019.
La ONU advierte en su nuevo reporte que el número de personas que usan drogas se incrementó a 292 millones en 2022, un aumento del 20% en solo una década, mientras que al mercado están llegando más opioides sintéticos que significan una grave amenaza para la salud pública.